La selección boliviana de fútbol vivió momentos de incertidumbre y tensión este fin de semana, tras quedar retenida sin explicación por autoridades venezolanas en el aeropuerto de Maturín. El vuelo chárter que debía llevarlos de regreso a Bolivia fue bloqueado por la dictadura de Nicolás Maduro, obligando a los jugadores a regresar al hotel de madrugada.
Según confirmó la Federación Boliviana de Fútbol (FBF), el equipo tenía toda la documentación en regla para partir, pero las autoridades no autorizaron el despegue, alegando “tráfico aéreo”, aunque solo dos aeronaves operaban en ese momento.
Oscar Villegas, director técnico interino, afirmó que ya sospechaban que esto ocurriría.
Ya lo sabíamos. Hablamos con el ministro de Gobierno hace una semana y le pedimos que dialogara con el gobierno de Venezuela para que nos dejen salir”,
Por su parte, Harold Howard, jefe de logística y seguridad, denunció un claro acto de sabotaje.
Finalmente, tras horas de incertidumbre, el vuelo pudo despegar al mediodía de este sábado. Sin embargo, el retraso afectó gravemente la planificación deportiva, pues el plantel debía entrenar esa misma tarde con miras al próximo partido de eliminatorias contra Chile.
La situación desató el malestar en la dirigencia boliviana y generó nuevas presiones diplomáticas. Para muchos, este es un nuevo episodio que evidencia la falta de garantías y la hostilidad del régimen de Maduro hacia delegaciones extranjeras.
Fotos con fines ilustrativos