La Policía de Migración detuvo a dos costarricenses de apellidos Espinoza Ortega y Mejía Guadamuz, por el aparente delito de tráfico ilícito de migrantes, en México de Upala, Alajuela.
La intervención policial determinó que ambos se encargaban de ejecutar la captación, encubrimiento y el transporte de personas migrantes nicaragüenses, ingresando a los migrantes de manera irregular por puesto no habilitado, cobrando un monto de diez mil colones por cada persona, con el fin de realizar el viaje desde la línea limítrofe hasta la terminal de buses Upala.
Al momento de la detención los masculinos viajaban en compañía de dos personas objeto del delito a altas velocidades, para evadir cualquier acción policial, exponiendo de esta manera la integridad de las personas migrantes y de la ciudadanía.